redes ópticas, Redefinido.
diciembre 1, 2018

El camino hacia Ethernet de próxima generación: ¿25G o 40G?

El camino hacia la próxima generación de configuración de red se ha manifestado últimamente no como una línea recta, sino como un viaje ondulado sensible al debate sobre estrategias competitivas para avanzar.

En un campo, existe el plan original para la transición de 10 G a 40 G Ethernet. El estándar 40 G se construye a partir de cuatro flujos de datos paralelos de 10 Gb/s enlazados a través de un transceptor cuádruple de factor de forma pequeño conectable (QSFP+); dependiendo de la distancia, se pueden implementar las especificaciones SR4 (cuatro carriles de corto alcance) o LR4 (cuatro carriles de largo alcance). En términos generales, SR4 encuentra uso para conectar conmutadores dentro de un centro de datos, mientras que LR4 se usa comúnmente para hacer conexiones entre sitios de centros de datos. Las conexiones se pueden realizar con cobre a través de un cable de conexión directa (DAC) o con fibra a través de un cable óptico activo (AOC).

Este enfoque de 4 x 10 Gb/s ya ha sido seguido por muchos centros de datos grandes, pero impone una limitación para lograr el objetivo común de red de próxima generación de 100 G. Se necesitan diez flujos de datos paralelos de 10 Gb/s para construir un 100 Ruta G, que requiere un transceptor receptor de 10 carriles con un factor de forma grande y difícil de manejar.
Un enfoque alternativo utiliza el transceptor QFSP28 desarrollado más recientemente, que ofrece una interfaz de 25 G de un solo carril. Se pueden usar cuatro flujos de datos de 25 Gb/s para producir una ruta de 100 G sobre cable de cobre o fibra dentro de un factor de forma compacto que es menos costoso de producir. Este enfoque también ofrece una mayor densidad de puertos, ahorra en el consumo de energía y requiere menos conmutadores y cables en la parte superior del bastidor (ToR).

Sin embargo, a pesar de estas ventajas, el enfoque de 25 G no es necesariamente el mejor enfoque en todos los ámbitos. Deben tenerse en cuenta factores como la compatibilidad con conmutadores anteriores, las opciones de conexión y los requisitos de longitud del cable. En términos de compatibilidad, 40 G tiene una historia de desarrollo más larga, lo que significa una gama más amplia de productos en el mercado; En cuanto a las opciones de conexión, Switch-to-Switch para 25 G ha tomado la delantera al llegar al mercado sobre Switch-to-Server. Y aunque 40 G DAC es más costoso que 25 G DAC, las longitudes de cable de tres o más metros requieren corrección de errores de reenvío (FEC) para 25 G, un factor que introducirá una mayor latencia en el sistema. 

Aún así, una encuesta de parte de la literatura disponible sobre el debate de 25 G versus 40 G parece apuntar en general, aunque con cautela, en la dirección de 25 G. Las necesidades individuales de la red, por supuesto, variarán. Para una consulta sobre la creación de una solución personalizada, contacta a nuestros expertos.